jueves, 5 de julio de 2012

Día 1: Una serie de catastróficas desdichas


Hola, interraileros (y padres desesperados)

Mariano: ¡Mamá! Deja de mandarme mensajes.

Siempre dijimos que el interrail iba a ser una aventura, y de hecho, ayer fue una aventura.
Primero, medio atacados nos subimos al avión, pensando que las mochilas no iban a caber, que los líquidos no iban a pasar… Al final no nos dijeron nada, ni líquidos, ni medicamentos, ni nada.
A pesar de salir un poco más tarde de lo previsto, llegamos antes. No tuvimos problemas con el avión. En el aeropuerto, al pagar el autobús, la mujer que nos atendió dijo que tenía “problemas” con los españoles (puede deberse, quizá, a que España ganó la Eurocopa 4-0 a Italia…) y por ello tuvimos que esperar bajo el sol y la increíble humedad romana antes de poder subirnos al autobús para llegar a la capital. En media horita estuvimos en Roma.

Cuando aun estábamos limpios

Lo primero que notamos fue el calor y que, en principio, se parece demasiado a Madrid. Eso sí, después seguimos explorando (¡¡y para ir al baño tenemos que pagar, claro!!). Misteriosamente es más fácil colarse en el metro que en el baño… Por cierto, hay duchas en la estación de tren de Termini…
Ciertamente no nos merecía mucho la pena comprar el pase turístico, de modo que tenemos que cogernos los billetes cada vez que montamos en metro o bus.
Por cierto, en Termini hay cerca una tienda de ultramarinos, por si queréis comprar nada más llegar (nosotros compramos pan para la comida y agua). A todo esto, el agua de las fuentes está muy rica y fresquita :3
¡Ah! Y sus fuentes siempre tienen agua corriendo, debe ser que les sobra… (Y NO HAY AVISPAS).
¡Preparados para la aventura!

Por la tarde fuimos al Trastevere. Bety iba perdiendo sus pantalones por segundos por una rotura y tuvo que ponerse otros. Qué mona ella.
(FOTO: ¿A qué no se nota que es un pijama?)

Durante el cambio en medio de la calle

El camino al Trastevere es largo a la par de lioso, pero se ameniza bastante cantando canciones de Digimon :D Lo bueno del viaje es que es cerca del Tíber y el calor no es tan agobiante (¡pero hay mucha humedad!).
Mariano: Es muy chulo, donde puedes descansar, pasar un buen rato.
Dámaris: Hay comida barata y tonos color pastel.
Mariano: Y camisetas de memes en todas partes.
Javi: Era muy cute. Y hay más fuentes por metro cuadrado que personas, es muy útil para rellenar botellas.

Posando con el Tiber to'reshu

Queremos remarcar una pizzería que nos encontramos por allí, callejeando en la Piazza de Sta. Ruffina, llamada Pan’Unto, donde comimos pizzas individuales de tamaño mediano que nos valieron de tres a cinco euros cada una, ¡y estaban muy ricas!
Comimos por 20 euros seis personas :O
Bety: Y el jabón del baño olía a rooosaaaas.

El restaurante baratito y bohemio

Terminamos de cenar (Bety: Sí, a las ocho y media terminamos), decidimos ir hacia el albergue, pensando que el Check-in era hasta las 11 y nos iba a dar tiempo, pero ni era a las 11 ni llegamos a tiempo. Realmente el Check-in era a las 10 y nos enteramos de eso a las 9:45.
Dámaris: Bety, te lo dije.
Lo bueno es que llamamos al albergue y nos permitieron alojarnos por un caso de emergencia y hacer el check-in por la mañana.

Cuando llegamos a la parada del autobús el último ya había salido… Sin embargo encontramos a unos conductores muy simpáticos (aaaaunque estuviesen molestos con los españoles porque España ganó la Eurocopa a Italia 4-0 ¬¬) que nos indicaron como llegar.
NOTA: Fijaros en el nombre de las calles.
Nos metimos por una calle equivocada y tuvimos que dar la vuelta, pero logramos encontrar el lugar y a las 12 de la noche pudimos llegar a nuestras cabañas.

Nuestra casita de campo... durante 2 noches

NOTA 2: Haced el check-in con tieeeempo. Nada más llegar.

Y bien, nos fuimos a dormir y así como se acabó nuestro primer gran día.









LECCIONES DEL DÍA 1
-          Nada más llegar hay que localizar el sitio para pasar la noche, no podéis dejarlo para el último momento.
-          Para evitar desastres horarios, hay que pensar siempre en llegar una hora antes de lo planeado.
-          No llevar cosas importantes en los bolsillos sin cremallera (sobre todo los traseros), se pueden extraviar cosas.
-          Los italianos son muy simpáticos, preguntadles si lo necesitáis.
-          A los italianos habladlos en español antes que en inglés, aunque respondan en italiano nos podemos entender.
-          Javi: Aunque todo parezca horrible al final del día, por la mañana todo es diferente.
-          Elena y Dámaris: En la Rusia Soviética todo es diferente…
Gasto medio: 15-20€

1 comentario:

  1. Da gusto ver fotos de la comida que tomais. Alimentaos bien. Lo del desayuno es un poco frugal, digo yo que os podiais comprar algunas galletas para acompañar la leche no solo la fruta.Seguid así, contandonos lo que vais haciendo. Como no quereis que os llamemos necesitamos información y fotos. "Víctor se que esto no te gusta pero soy "madre". Besos

    ResponderEliminar